Texas Gulf Coast Catholic (Corpus Christi, Tex.), Vol. 14, No. 29, Ed. 1 Friday, December 8, 1978 Page: 3 of 6
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Friday, Decembers, 1978
TEXAS GULF COAST CATHOLIC
Page 3
Simon Pedro
por el Hermano Novlclo
Louis Rodriguez, O.S.B.
Simon era uno de los
primeros discipulos de
nuestro Senor Jesueristo.
Fue nacido en Betsaida,
una aldea en Galilea.
Despues, se fue a vivir a
Capernaum. Simon
pescaba con su hermano
Andres en el lago de
Genesaret. Los hermanos
eran Pescadores de
negocio. Simon y Andres
tenian su propio bote en
que pescar. Como judios de
su tiempo, Simon y Andres
tambien ora ban por la
venida del Mesias. Cuando
Juan el Bautista empezo a
predicar en el valle del
empleo de pescar que lo judios que les daria su
siguiera. Cuando nuestro carne para comer y su
Senor escogio a los doce sangre para beber, Muchos
apostoles, Pedro era uno de se retiraron de Jesus
ellos. Cualquier tiempo que cuando les dijo esto porque
Jesus queria cruzar el lago no creian. Pedro fue el
de Genesaret usaba el quien dijo que Jesus era el
barco de Pedro. Pedro con Hijo de Dios cuando (Una nota del editor: Permiso para reimprimir este articulo fue
Santiago y Juan eran muy nuestro Senor pregunto que obtenjdo dei periodico “El Visitante”. Salio en la edicion del dia 3 de
queridos a Jesus. Estos decia el pueblo de El. En la ojriembre 1978.)
apostoles vieron la gloria ultima cena, cuando Jesus
por EL PADRE SATURNINO LAJO, O.M.I.
(El Padre Lajo esta especializado en la catequesis de adultos. Obtuvo
Adviento, 1978.
y aunestamos esperando
del Senor en el Monte lavaba los pies de los
Tabor. Ellos tambien apostoles Pedro no queria
estuvieron con Ei durante que Jesus le lavara los
la agonia en la huerta de pies. Pedro hasta nego que
Getsemani. Ellos habian conocia a Jesus afuera de
visto el milagro de la la casa del Sumo Sacerdote
revivificacion de la hija Caifas, perosearrepentioy
muerta de Jairo. lloro mucho. Cuando Maria
Pedro fue muy amado Magdalena vino y informo aan
por nuestro Senor Jesus, a
y
IVIMOS en un
mundo donde los lo-
gros alcanzados se
confunden con la
espera de lo que
necesitamos conseguir.
a seguirle.
Los evangelios tienen
mucho que dicir de Simon.
visible de la Iglesia. Er. del sepulcro.
Cesarea de Felipo, nuestro
Salvador dijo que
los apostoles que la p^os sentimos orgullosos de los
;rda“r.bana«c,u;rar,r; s?r{?rMT,irr-*^ zz tt ften!dos en;°s, cam7
____apostoies y la caoeza y juan correnon ai lugar de |a tecnologia, de la medi-
cina, de la ciencia en general, y
al mismo tiempo nos sentimos
Cuando por primera vez su so’bre Muchos anre despues de ^XjaTslfeS?- muchas
conocio a Jesus, nuestro p. Mnten is- su vida, Pedro mostro su fe nos aeJan sausiecnos, mucnas
Senor le dio un nombre En “a ulU^Tce™ * P°r Como veces nos confunden e mquie-
nuevo Jesus le dijo que su «•“-.* ■«
nombre sena Cefas que f d_ , Jesueristo, Pedro trabajo sienao tan imperrecto como an
quiere dicir “piedra" en su a “ tales Yd2m2 duro * sufrio mucho E1 vio teS* "0 P°r
leguaje de arameo. Pedro de ,g reg(JITec^ioil) Jesus la predicacion del es extrano que nos sorprenda-
es la translation en gnego mando a Pedr0 a todos
del nombre arameo Cefas. ]qs toles fueron
Desde ese d.a en adelante e, mund() entero predi.
fue llamado Pedro 0 Simon fflndo e, evangelic del
Pedro- .... Senor.
Desde un pnncipio Jesus
mostraba que queria a Pedro tenia una gran fe
Pedro para un puesto en Jesus. Pedro no quizo
importante en el trabajo de dejar de seguir a Jesus en
se Reino. Jesus le pidio a Capernaum cuando
Pedro que dejara su nuestro Senor les dijo a los
Los Nuevos Fariseos
zalamera y almibarada le
dijo: “Creo conocerla.
„ . Usted es Jovita, verdad?
Podna empezar este Como Ya „ que ^
por el P. Angel Villalba,
O.M.I.
articulo al estilo de las
parabolas de Jesus:
divorcio ultimaniente y
sobre esq la queria hablar.
“Semejante es el reino de por DjM m ^ que
os cie us . omo me trtnara ^ e^trome-
indedessaben las parabes uda ni *
las son histonetas, no f___. , ,,
' . ofenderla. Bueno,
necesanamente reales „ ^ me ^iere
peros. veridicas, conladas ,e ^ ^
para sacar de ellas una
leccion o moraleja. En mi
joven sin ocultar su
■ u i j-r- extranexa. “Pues unica-
rest, la parabola ddiere un mantequeconlo
n ° . e. a c sica y acercane a comulgar y,
tradicional: en mi caso la a . . . . **
historieta es historia y lo
veridico, verdad. Veran.
v5.
evangelio hasta los gentiles mos a nosotros mismos hoy es-
del mundo. Despues de P^rando. . . .
muchos anos de labor, NoNosComprometemo8
Simon Pedro, el primer
papa, murio como martir Pero mochas veces no es-
en Roma. “Jesus le pre- peramos bien. Somos conscien-
gunto: ‘Simon, hijo de que existen problemas en
Jonas, me amas?', Pedro nuestro mundo y esperamos
le contesto: ‘Si, Senor, tu que otros los solucionen. Nos la-
sabes que te arao.'" (San mentamos de que los campesi-
Juan 21:16) nos no sean remunerados justa-
mente y esperamos que alguna
"Union” haga justicia. Oimos
que los emigrantes no son tra-
„ , , tados dignamente y esperamos
Hasta aqui parte de qUe 0 ellos mismos lo-
nuestra conversacion; el gren ser respetados con digni-
"f° no hare al care dad Nos quejamos de las
Aaora la mora eja. Si, el descrhninacioncs que aun exis-
fanseismo es una mala ten entrc nosotrosy esperamos
breten^TaSnre 1“ P™>‘° » >*"** remedio a
dal trri ■ • csta situacion. Nos lamenta-
de la Iglesia. Far,sere son d , problemas famiUa-
cr" ]“stos y res, de la delincuencia, de las
f J05 de“as drogas ... y esperamos que
valora lasaparientdas y no p0r arte de magia Se SOlUcit>‘
a la sinceridad del corazon "'" Esperamos que las cosas
Los que se fijan en detalles camb,en' t'ue un ""*»»
y pasan par alto lo amanezea, pero en realidad no-
suslancial. Los que, como, 50tr0S 1,0 nos oompTometemos
cuelan un ^31-3 ^ue nuestras esperanzas
. se realicen.
8 Al comenzar el Adviento,
Llamo a la puerta, abri y,
entrando, se echo a Uorar
desconsoladamente. Era
una senora joven, tal vez en
sus treintas. y bien
parecida. La invite a
sentarse y deje que llorara,
alargandola una caja de
usted sabe, la comunion es decia Jesus,
una cosa tan grande y mosquito y
sagrada . . . Me refiero al tranquilamente . . . . ,.
ello camello. Los que se sirven "»s mtroductmos en uoibempo
de la Iglesia en vez de
servir a la Iglesia.
escandalo que con
pudiera causar
“Esacandalo? Y por que
nabia de causar yo
escandalo?" A lo cual la
devota senora contesto con
todo aplomo; "Hijita, muy
sencillo: porque como
bene la desgracia de mal- i'or culPa de e,los n
nrnrnrn !lr !P ser divoTciada, la gente de uno y mas de dos que un
Dios ^Ia *ueron ca toll cos ya no
procuro tener para ' "7 ”
ocasiones como esto.
me libre de meterme en vi
das ajenas, pero yo la
La historia que me conto recomendarla que no
era poco mas o menos viniera mucho a la iglesia,
como sigue. Su marido la por lo menos a esta, y que
habia dejado, divorcian- no comulgara mientras
dose para casarse con otra dure la
mujer. Pero el motivodesu situacion.
visita no era ese. Afortuna- “Que le dijo eso la viejita
damente la nueva situa- metiche? — le corte yo
cion, con dos hijos a neno de indignacion. — Si
quienes a tender, no la habra gente estupida en el
habia sumido en el pesi- mundo! Digame quien es
mismo y la desesperacion, porque la voy a dar una
sino que la habia acercado reganada que se va a
mas a Dios, encontrando en acordar de ella para el
la religion la fortaleza y el restodesusdias.” “Oh, no.
consuelo que necesitaba. padre; mejor no. Tal vez
Por eso se la veia en la fuera peor el remedio que
iglesia y participaba en las la enfermedad y quien sabe
actividades parroquiales. como reaccionaria contra
Hasta que un dia en una de mi y contra usted.” Bueno,
sus visitas a la iglesia se yo se como reaccionaron
encontro con una de esas los fariseos contra Jesus,
senoras que se arrodillan pero tambien se como
ante lodas las imagenes y Jesus reacciono contra los
respiran ei hUmo de todas fariseos. Y yo no creo que
las veladoras. La senora se cumpliria con mi deber si
le acerco devotamente, rne quedara callado y no la
rosario en mano, y con voz defendiera.”
de espera, un tiempo de revi-
si6n de nuestras esperas huma-
nas y cristianas, conceptos am-
Dios nos libre de lo^ ' bos en intima relacion para un
fariseos! No hacen ninguh creyente que profesa fidelidad
bien a la Iglesia y con a un Dios Encarnado que viene
a cumplir las esperanzas de
toda la humanidad. Sin em-
bargo, el Adviento no es, sin
mas, tiempo de espera; es
tiempo de esperar bien. Porque
corremos el riesgo de esperar
lo que nunca va a venir; o, di-
cho de otro modo, porque es po-
sible que venga lo que nosotros
frecuencia la hacen mucho
mal. Por culpa de ellos mas
lo son. Por eso yo, entre el
fariseo que decia “te doy
gracias porque no soy
como los demas ...” y el
publicano que de rodillas
pedia perdon a Dios, me
presente qued° con el publicano.
Entre Simon que mirando
con extraneza como Jesus
se dejaba lavar los pies,
pensaba interiormente “si
este hombre fuera profeta,
sabria que clase de mujer
es esa . . . ” y Maria
Magdalena lloraiido
arrepentid a los pies de
Jesus, me quedo con Maria
Magdalena. Mas todavia:
entre el hijo prodigo
volviendo al padre,
derrotado y arrepentido, y
su hermano, el hijo que
nunca desobedecio pero
que rehuso dar la
bienvenida a su hermano,
me quedo con el hijo
prodigo. No harian ustedes
lo mismo? Por lo menos
lendriamos de nuestra
parte al Evangelio.
nunca esperabamos.
Es lo que les paso a mu-
chos de los judios ante el naci-
miento del Hijo de Dios; el
Nino de Belen se encuentra solo
precisamente porque no era ese
el Mesias que ellos esperaban.
Y no fue porque antes no se les
hubiera anunciado; el Antiguo
Testamento no es mas que una
preparacion y anuncio de la lle-
gada del Mesias. Pero no supie-
ron esperar bien. "Nosotros
esperabamos . . .”, decian en
una ocasion los discipulos de
Cristo ; aun ellos se sienten de-
cepcionados porque Jesus no
habia realizado sus suenos.
Cristo ya vino
Algo parecido nos puede
pasar a nosotros ante la Navi-
dad de 1978: que nuestras espe-
ras esten fuera de la realidad.
Ciertamente el Nino de Belen
no va a venir como hace dos mil
ahos. Los cristianos hoy no so-
mos ya los desamparados
judios de entonces. Cristo ya he
venido a redimirnos. El Nino de
Belen es para nosotros el Cristo
muerto y resucitado. En El no
solo esta la esperanza sino la
realidad de nuestra salvacion.
En ese nacimiento esta en-
vuelto el misterio de la vida y
de la muerte redentora capaz
de transformar nuestra histo-
ria y nuestra vida.
Sin embargo, esta realidad
es aun promesa que orienta
nuestra mirada hacia el futuro
en una actitud de activa espera.
Dice Peguy que "Dios puso se
esperanza en nosotros. Y es que
el encuentro efecto con el
Senor, el cambio que se ha de
realizar en ese encuentro, la
nueva vida que anhelamos, el
mundo nuevo que soflamos van
a depender de nosotros, de
nuestra cooperacion con el
Senor que viene.
Por eso, esperar con los
brazos cruzados a que los otros
o algo magico venga a transfor-
mar el mundo, NO. Una espera
activa de quienes asumen con
responsabilidad la tarea *de
transformar el mundo empe-
zando por nosotros mismos, SI.
Asi lo dice la cancion de R. Al-
puente:
“No creas que con el
tiempo las cosas cambia-
ran, aqui no cambia nada
si no lo haces cambiar.”
su certification para tal especializacion de la universidad de Salamanca
en Espana y su “Masters” en educacion de la Pan American University
de Edinburg, Texas. En la actualidad esta integrado al Departamento de
Educacion de la Diocesis de Brownsville en Texas, donde forma parte del
equipo educador. Es autor de dos programas de ensenanza catequistica:
“Una Mirada Cristiana a la Vida y Bauticemos con Responsabilidad.”)
Y en esto se encierra no
solo el espiritu del Adviento
sino una parte muy importante
del mensaje evangelico. A esta
idea dedico Jesus varias de sus
parabolas. La liturgia del pri-
mer domingo de Adviento nos
presenta una de ellas marcando
asi el espiritu que debe envol-
ver al cristiano durante este
tiempo. "Cuidado con dor-
mirse, porque no saben cuando
llegara el momenta, “nos ad-
vierte Jesus. Y a continuacion
expone la parabola del hombre
que se va al extranjero dejando
su casa bajo la responsabilidad
de sus servidores. Su consigna:
"Esten en vela ... no vaya a
presentarse de pronto (el
senor) y los encuentre dormi-
dos.” Y para recalcar aun mas
la idea de la vigilancia, Jesus
termina la parabola en un tono
que no deja lugar a dudas: "Y
lo que les digo a ustedes se lo
digo a todos: {Esten en vela!"
(Me., 13:33-37)
Estamos Sofiando
No se podia expresar mejor
lo que para nosotros ha de signi-
ficar la espera activa; estar en
vela es lo contrario a estar dor-
mido. Y estamos dormidos
cuando nos dejamos envolver
en el sueho de que alguien va a
venir a solucionar nuestros pro-
blemas sin que nosotros mova-
mos un dedo.
Dios nos ha enccmendado
el cuidado de la casa. Para no-
sotros la casa es el mundo en
que vivimos, es nuestra propia
vida con sus logros y fracasos,
con sus adelantos y retrocesos,
con su misteriosa realidad del
bien y del mal. La casa es del
Senor y nuestra; a El le necesi-
tamos para transformarla; por
eso le pedimos que venga.
Pero resulta que el Senor
puede vehir cuando menos le
esperamos. "No saben cuindo
llegara el dueho de la casa, si al
anochecer, a media noche, al
canto del gallo o al amanecer’,
nos dice Jesus sobre el senor de
la parabola. Esta es la manera
misteriosa de llegar dios a
nuestro mundo. Si prefabrica-
mos su llegada el dia de Navi-
dad donde todo esta previsto de
la manera mas facil, corremos
el riesgo de la decepcion, el
riesgo de que todo siga como
siempre.
Se Presenta en Ellos
De ahi la necesidad de pre-
parar la casa, de preparamos
nosotros mismos. En primer lu-
gar, aceptando consciente-
mente io inesperado de la Ue-
gada de Cristo para que no nos
sorprenda. El llega a nosotros
en la persona de nuestros her-
manos; El esta presente en
esos campesinos que exigen
justicia, en esos emigrantes
que piden respeto a sus dere-
chos humanos, en cada persona
que se siente (kscriminada;
Cristo esta presente en los
acontecimientos de cada dia:
en los problemas planteados en
la faniilia, en la sociedad, en la
Iglesia. Y esta ahi no sdlo por-
que hay personas envueltas —
presencia de Cristo en los her-
manos — sino porque ahi esto
presente su voluntad de solucio-
nar esos problemas. Hemos de
confesar que ese Jesus nos en-
cuentra muchas veces dormi-
dos. No le reconocemos ni re-
conocemos su voluntad.
Esperemos Activamentc
*
Y esta es su voluntad sobre
nosotros: que nos sacudamos
del sueno, que estemos despier-
tos porque esta es la hora de ac-
tuar, la hora de cumplir con la
tarea que nos ha dejado ei
Senor al encomendarnos el cui-
dado de la casa. Tener la casa
preparada va a significar tra-
bajar activamente, envoi- .
viendonos en la busqueda de so-
luciones a los problemas que
aquejan a la humanidad y a no-
sotros mismos. Si, esperamos
que Alguien venga a salvamos;
pero ese Alguien que es Jesds
necesita nuestra cooperacidn.
Los emigrantes, los campesi-
nos, padres e hijos, los delift-
cuentes .. . necesitan al Salva-
dor y nos necesitan a nosotros.
Des de nuestra fe creemos que
sin El nada -podemos hacer.
Pero no nos duramos; El nos
necesita despiertos para que la
esperanza de un mundo mejor,
un mundo nuevo sea pronto una
realidad. Y es asi, por medio de
una espera activa, como podre-
mos dar al mundo razdn de
nuestra esperanza cristiana. La
semana que viene: “Y AtnPre*
parando el Cam too del Seflor
{Espdrelo! Tambidn esriba-
nos si le gustan los articulos.
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Que nazea otra ves Cristo
Los ninos personas logicas
por MELLY AVELAR
Despues de una corta
ausencia debida a la
enfermedad me da muchi-
simo gusto estar de nuevo
con ustedes para platicar
un poco sobre esos seres
maravillosos, graciosos y
tan logicos, como son los
ninos.
Es absolutamente
necesario que nuestras
palabras, nuestras
actitudes no les pongan
intranquilos. Jamas
debemos aterrorizarles con
amenazas y tampoco
actuando desesperada-
mente ante aconteci-
mientos imprevistos. Por
el contrario si les guiamos
con amor y con tranquili-
dad, ellos-caminaran mas
seguros por la vida.
Evitemos que se hagan
miedosos. Si ellos ven que su edad y decirle que
ia lia siempre mira debajo cuando se duerma va a
de la cama antes de recuperar sus fuerzas y
acostarse y esta despues manana estara mas activo
me haberle dicho varias yalerta.
veces que si no se porta
bien se lo va a llevar el Acerca de que no se
"coco”; pues natural- ponga el saco, que se meta
mente que el nino se enloscharcosdeaguadela
angustiara ante la obscuri- calle, etc., no debemos de
dad y ira perdiendo la amenazarlo con el clasico
confianza de acudir a papa “si no te pones el abrigo te
o mama cuando ha actuado enfermas y el doctor te va a
de una manera incorrecta, dar una inyeccion que te
pues la amenaza le ha ido duela mucho"; vamos, que
asustando de una manera hay otras maneras tan
que le perjudicara mucho. logicas de explicarle la
Cuando el pequeno no se razon por la que debe
quiere dormir, no hay que abrigarse. Sin duda que
decirle exageradas frases amenazarles con el doctor
de susto para obligarlo, es un error doble pues tal
sino mas bien cm todo vez es por eso que tanto se
carino y pacienda hablar oye de musica de fondo el
con el, contarle alguna lloriqueo de algunos ninos
historia interesante para en el consultorio del doctor.
por MARIA TERESA DIAZ
Nos hace falta otra vez la
Navidad. Es preciso que
nazea otra vez Cristo. Que
otra vez suceda este
Misterio de Belen y de la
Virgen y del Nino recien
nacido.
Porque muchos cristi-
anos dejamos que Crista se
nos vaya "muriendo”
dentro del alma dia a dia.
Porque vamos por este
mundo, casi sin querer,
haciendo la vida y el
mundo y las cosas sin
para que se nos encarna
Christo muy adentro, para
que nos portemos como lo
que El hizo de nosotros:
Unos Cristianos, y no solo
unos jovenes promete-
dores. unas dislinguidas,
damas, unos respetables
profesionistas.
Estudiamos mucho,
trabajamos con eniusia-
smo, pero hemos dejado de
meditar las bienaventur-
anzas. Hemos ido creyendo
que el exito es el poder, el
dinero y ya casi nos
fos que ni nos acordamos
del projimo, mucho menos
le vamos a ayudar. Bus-
camos tan incansable-
menle nuestra buena vida
que ni queremos dedicar u
unos minutos al problema
de como acabar con el
hambre y la miseria de
millones de seres humanos
en el mundo.
Si. que nazea otra vez
Cristo. para que otra vez
nosotros vivamos como
cristianos. Que llegue ia
Navidad.
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Aprendimos que ganar-
emos el cie!o amando a
nuestros hermanos como a
nosotros mismos; pero
andamos tan preocupados
de nuestros propios triun-
Cristo. Ese Cristo que es olvidamos de lo que es el
infinito, pero que a muchos pesebre. la cruz . . .
cristianos se nos acaba tan
pronto.
Necesitamos que nazea
otra vez y que viva con
nosotros, porque nos hemos
ido dando cuenta de que El
ya no es el principal
ingrediente de nuestra
vida, de nuestra sociedad,
de nuestro mundo y por lo
cual errarnos por donde
quiera que vamos.
Le hemos ido arrincon-
ando en las Iglesias, le
hemos ido colocando cada
vez mas arriba y mas lejos.
Hemos dejado de pensar en
El como un Nino, ni
siquiera como un Hombre .
.. solo pensamos que es un
Dios en el cielo.
Por eso necesitamos
tanto otra vez la Navidad,
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Freeman, Robert E. Texas Gulf Coast Catholic (Corpus Christi, Tex.), Vol. 14, No. 29, Ed. 1 Friday, December 8, 1978, newspaper, December 8, 1978; Corpus Christi, Texas. (https://texashistory.unt.edu/ark:/67531/metapth840516/m1/3/: accessed July 16, 2024), University of North Texas Libraries, The Portal to Texas History, https://texashistory.unt.edu; .